Hay que tener presente que la expresión corporal existe antes que el propio lenguaje, por lo que estamos absolutamente preparados para interpretarla. Y aunque surja natural y espontáneamente y al principio pueda costarnos más, también estamos preparados para controlarla parcialmente. Continuando los consejos de la primera parte y teniendo en cuenta que según los expertos lo que no se dice es entre el 70 y el 80% de lo que comunicamos, las siguientes claves podrán ayudarnos en nuestra próxima presentación en público.
La comunicación no verbal en una presentación: otras claves a tener en cuenta.
Si bien es importante tener en cuenta todos estos consejos, también lo es que cada persona y situación es única, por lo que resulta complejo reconocer los patrones de comunicación comentados. Por este motivo, practicar en tiempo real y adquirir experiencia en estos escenarios es clave para llegar a ser hábil en el arte de dominar la comunicación corporal, tanto la emitida como la recibida por parte de nuestros interlocutores. ¡Mucha suerte en vuestras próximas presentaciones!