Cada vez que ponemos en marcha un nuevo proyecto web, ya sea una landing page o un sitio mucho más estructurado, una de las principales preocupaciones para los analistas funcionales, diseñadores, programadores y especialistas de experiencia de usuario es el testing A/B. De hecho, se trata en la actualidad de una de las técnicas más utilizadas en marketing digital para optimizar las estrategias de captación de clientes y usuarios. Pero, ¿qué es El testing A/B? Básicamente, se trata de preparar dos versiones de un sitio con el fin de medir y evaluar los parámetros que se hayan definido previamente y descubrir cuál de las dos es más efectiva para el cumplimiento de la estrategia del negocio. Estas pruebas pueden ser realizadas con respecto a la ubicación, tamaño, colores y cantidad de elementos de texto, imágenes y CTAs (llamada a la acción), e incluso, la estructura visual del sitio.
Todo el proceso del test también sería iterativo, ya que en cada momento tanto las características de los usuarios como también las estrategias de negocios pueden variar. Así, al tener una versión seleccionada, podemos reiniciar el proceso incorporando nuevos cambios para una tercera versión, pero teniendo siempre cuidado de no convertirlo en un proceso de cambios muy constantes que puedan desorientar a los usuarios. Google Cloud Platform ofrece una forma muy interesante de poder llevar a cabo este tipo de tests usando Google App Engine, un servicio de alojamiento web del tipo PaaS (Plataforma como servicio) con alta escalabilidad y disponible para varios lenguajes (PHP, Python, Java, y más) que permite almacenar y servir varias versiones de tu sitio web. Con ello conseguimos tener disponible más de una versión al mismo tiempo, indicando el porcentaje de tráfico que queremos destinar a cada una de ellas. De esta forma, cualquier usuario entre a nuestro sitio web (www.tu-dominio.com) podrá ver una u otra versión, y su comportamiento con cada una de ellas nos permitirá decidir cuál es la mejor. Además, a través de la consola de Google App Engine podremos realizar el seguimiento del tráfico y solicitudes para cada una de las versiones, como vemos en la siguiente imagen:
También tenemos la oportunidad de configurar cualquier otra herramienta que utilicemos para el testing directamente con la url interna que crea Google App Engine en cada una de las versiones creadas. En definitiva, con los tests A/B podremos conocer de mano de los usuarios sus expectativas e interacciones de acuerdo a los cambios que vayamos proponiendo en nuestra web, y de esta forma podremos establecer patrones de comportamiento que nos ayuden a determinar las claves para definir nuestras estrategias de negocios.