Cova López-Cancio, 09 Septiembre, 2025
El sector de la alimentación está viviendo uno de sus momentos más exigentes pero también probablemente más apasionantes de su historia reciente. En este contexto, la innovación tecnológica es plenamente obligatoria y no solo en el aspecto culinario (que también). Ahora los hosteleros deben estar al día de los nuevos canales de venta, entender que los márgenes pueden recortarse si se renueva en el plano digital y, al mismo tiempo, abrazar la presión porque una elaboración sea instagrameable.
Es fácil reconocer que estamos en un escenario muy saturado, y precisamente por ese motivo, como especialistas en estrategia digital, hemos querido facilitar la tarea identificando 7 pilares digitales que ya están marcando el futuro del sector alimentación en 2025-2026. En este artículo te explicamos cómo empezar a adaptarte desde hoy mismo, sin necesidad de hacer una transformación integral que te cueste unos recursos infinitos.
Empecemos con los entrantes.
La digitalización es un fenómeno que llegó hace ya casi dos décadas a muchos sectores, de manera transversal y diferenciada. Mientras que en los primeros años unos ya estaban sacando matrícula de honor, otros todavía estaban dando sus primeros pasos. Y algo así sucede con el sector de la alimentación, que en su presente aún muchos se muestran resilientes a “lo de siempre”, y se agarran como un clavo ardiendo a sus idiosincrasias más tradicionales.
Pero claro, el mercado ya tiene otras reglas y hay que aprender a ganar en ese juego. La transformación digital pasa por una actualización técnica, pero también tiene que atravesar a los departamentos de marketing para que todas las decisiones estratégicas sean coherentes. Uno de los objetivos principales debe ser repensar cómo generas valor, cómo conectas con tu cliente y cómo haces que te elija (y te vuelva a elegir) en un entorno saturado de pequeñas descargas de dopamina.
Las empresas del sector alimentación han crecido de manera natural apoyándose en las amplísimas estructuras que las componen (productores, distribuidores, cocineros, etc.). Sin embargo, ese modelo empieza a hacer aguas y la automatización de procesos se ha convertido en una palanca imprescindible para crecer de manera eficiente.
A día de hoy existen herramientas como CMS personalizados que permiten realizar inventarios en tiempo real, sincronizar datos entre ecommerce, CRM y stock real, automatizar pedidos u organizar la facturación de una manera optimizada. Todo ello se traduce en tiempos más eficientes, ahorro de recursos y una mejora de la experiencia del usuario y de tu propio equipo interno.
El branding digital es clave y complejo, sobre todo si tenemos en cuenta que tu cliente no puede tocar, oler ni probar tu producto antes de comprarlo. Por eso, la identidad visual, verbal y sensorial debe estar alineada con sus expectativas. Estas son algunas claves:
¡Ah! Y un consejo clave: configura tu branding digital desde la experiencia de usuario, no desde la nostalgia o la intuición.
Si hay una ventaja que nos traen los entornos digitales es la posibilidad de conocer a tu cliente. Gracias a herramientas como los CRMs, los sistemas de analítica avanzada o incluso las integraciones básicas de email marketing con comportamiento web, ahora podemos construir experiencias personalizadas que acompañen con empatía y sin necesidad de tener los recursos de una gran multinacional.
Veamos un ejemplo práctico: Un cliente habitual de productos sin gluten compra cada dos semanas. ¿Recibe sugerencias en base a su patrón? ¿O le llegan correos genéricos sin relevancia? La personalización consiste sencillamente en identificar micro-momentos y aprovecharlos. Estos pequeños detalles incrementan los ratios de conversión y al mismo tiempo fidelizan reforzando la sensación de que la marca entiende a quien tiene delante.
Antes de tomar la decisión de estar presente en múltiples canales, es clave entender qué rol cumple cada uno en la experiencia de nuestro cliente, y entender cómo se conectan para impulsar la decisión de compra. Las marcas que están liderando el cambio en 2025 no se preguntan “¿deberíamos estar en Amazon o en Glovo?”, sino “¿qué espera nuestro cliente en cada punto de contacto, y cómo hacemos que todo tenga sentido?”. Veamos algunos de los ejemplos más comunes:
El contenido necesita de estrategia para que funcione. En este sector la apariencia del producto se cuida y que la comida “tenga buena pinta” no va a lograr que te diferencies. El contenido que lo acompañe deberá cumplir una triple función: educar, ayudando al consumidor a entender mejor tu producto; emocionar, haciendo que conecte con tu propuesta de valor; y vender, facilitando que las palabras conduzcan de forma natural hacia la compra.
En este aspecto, será fundamental que tengas en cuenta dónde y de qué forma lo publicas: recuerda optimizar los copies si son para redes sociales, o perfeccionar el enfoque SEO si son para tu web. Ser eficiente está bien, pero si reutilizas palabras de un canal a otro sin optimizar, tu posicionamiento puede correr el riesgo de caer en picado.
Sabemos que en un sector tan tradicional puede ser difícil imaginarse aplicaciones prácticas de la IA, pero simplemente te invitamos a considerarla como una herramienta más al servicio de tus objetivos de marketing y comerciales. Veamos algunos ejemplos:
Si nos permites un consejo, recuerda implementar este tipo de herramientas una vez tengas definida tu estrategia digital. En caso contrario, estarás optimizando procesos que probablemente después no encajen con el resto de tu puzzle empresarial.
Aunque hay muchos parámetros o KPIs que a día de hoy se siguen teniendo en cuenta como los seguidores o las impresiones, recuerda prestar atención a aquellos datos que conectan directamente con tus ventas. Algunas de las más relevantes a día de hoy son:
Tras repasar estas siete claves, puede que sientas que tu proyecto ya está aplicando algunas, y que probablemente habrá otras con las que todavía quede mucho por recorrer. Sea cual sea tu escenario, hay algo que conviene recordar: el verdadero bloqueo digital suele estar en los errores que se arrastran sin ser conscientes de ellos.
En nuestros 20 años de experiencia trabajando con empresas del sector, hemos detectado patrones que se repiten más de lo que parecen: contenidos sin estrategia, webs que son visualmente interesantes pero no llegan a convertir, o campañas que realmente no alcanzan a quien deberían.
Si quieres saber cuáles son los más frecuentes y empezar a detectarlos, descarga gratis un recurso muy práctico que han preparado nuestros especialistas y que te puede dar la solución para empezar a aplicar optimizaciones desde hoy mismo.
La estrategia digital empieza por saber qué evitar, pero crece de verdad cuando defines con claridad quién eres y cómo te diferencias. Próximamente te enseñaremos cómo construir un branding digital potente que inspire y convierta. Toma asiento: vamos a rediseñar el impacto de tu marca desde dentro.
¡Ah! Y si sientes desde ya mismo que nuestros expertos pueden marcar un antes y un después en tu marca, no dudes en contactar con nosotros. Estaremos encantados de ayudarte.
Nos leemos en breve.
Cova López-Cancio, Responsable de Comunicación Digital