Cuando contemplo el acercamiento (mejor dicho acoso) del universo de las aplicaciones móviles a un sector herido en nuestro país como la hostelería, no puedo evitar asociarlo con los
documentales de animales de La 2: veo 3 o 4 hienas que esperan su turno para devorar los restos de una cebra agonizante.
El día en que me encontré con qlikBar, mi idea cambió… Esta vez no había hienas y la cebra pastaba tranquila. Y es que
qlickBar no es una aplicación más, es una plataforma que conecta a hosteleros y clientes de forma sencilla, innovadora y útil para ambas partes.
Generalmente
las ideas que acaban funcionando a corto plazo, son las que complementan o enriquecen a algún sector completamente establecido como es el caso de la hostelería. Sin grandes innovaciones ni riesgos de inversión innecesarios, se puede encontrar un sitio en el mercado. Para poner un claro ejemplo de todo esto, qlikBar me lo pone muy fácil.
Con
qlickBar, disponemos de todas las funcionalidades típicas de este tipo de apps: búsqueda de restaurantes por geolocalización, comentarios de usuarios, etc…
Hasta aquí todo bien, pero ahora viene lo interesante: Siempre que los establecimientos estén asociados (existen distintos planes para ellos a precios muy asequibles),
nos permite consultar la carta y precios de un bar o restaurante,
hacer pedidos sin necesidad de esperar al camarero (mediante código QR en cada mesa) e
interactuar con el resto de clientes. Incluso plantean para el futuro la
posibilidad de pagar la cuenta desde la app. ¡Aleluya!
La usabilidad de la aplicación es notable y sólo se echa de menos mayor número de establecimientos asociados, algo lógico por otra parte en sus pocos meses de vida… seguro que llegarán muy pronto.
Este documental, va a acabar bien