Poco después del amanecer del jueves, el inmaculado cielo azul que asomaba sobre el depósito de agua tan característico del Matadero de Madrid advertía la calurosa jornada que se avecinaba en el espacio Ironhack del recinto cultural. A la llegada de los primeros asistentes, se respiraba un clima de excitación, ilusión y nervios generalizados que no se disiparían hasta bien entrada la primera toma de contacto con el público: cuando Andrés Gonzalez, CEO de Góbalo proyectaba una cueva que metafóricamente reflejaba el día a día del sector, bien sea en una agencia de publicidad o en las oficinas de cualquier empresa que se tercie. Era una clara alusión a la gran intención del evento: crear un espacio en el que, durante unas horas, se compartiese aprendizaje, se condujese la mente hacia caminos que a veces no hay tiempo de recorrer por las prisas diarias de llegar a meta.Ya con el espacio Ironhack abarrotado, el humor sureño de Dani Jurado hacía las veces de cafeína para aquellos que aún no la llevaban en vena. Algunos de los presentes vimos confirmado que sufrimos una enfermedad, en el segundo país del mundo donde más afecta: la nomofobia. Y es que, en un evento sobre marketing digital, pocos o ninguno de los presentes se mostraba dispuesto a renunciar unos segundos a su bien más preciado, ¿Cómo iban a dejar de twitear durante aquella charla?.La compañía de Yoda, presente en varias ocasiones durante el evento, ayudaría a Dani a explicar datos, claves, consejos y curiosidades sobre las nuevas tendencias de las estrategias móvil con los micromomentos como protagonistas. “Hay que medir. Si no lo hacemos, perdemos el norte”. Y eso para alguien de Sevilla, no es poco decir.Después de Adwords, Ads y Display, llegaría el turno de José Romero, que cambió a Yoda por nada menos que el mismísimo Obama para acompañarle en su relato. Cómo generar referencias, el linkbuilding, el contenido de valor. Palabras mayores de un José que pronunciaría una de las frases con más engagement del encuentro: “No queremos construir links, queremos ganarlos. Que nos referencien automáticamente”. Of course we can!Todavía no había entrado Daniel Yuste a escena cuando los rugidos de estómago se mezclaban con los cuchicheos sobre cuándo venía el descanso, si antes o después “del de Designit”. OK, conseguimos hacer un gran evento, pero el hambre -agudizada por las fotos de los dulces de Wicked Sweet que rulaban por las redes-, siempre manda. Lo asumimos y seguimos. ¡Menos mal que seguimos! Que Daniel Yuste es un crack del sector ya es más que sabido, pero los que aun lo desconocían iban a olvidarse de su voraz apetito durante los 40 minutos siguientes.Otra vez Star Wars, otra vez la dificultad de elegir entre transformación digital e innovación. “Si no cuestiona el modelo de negocio, no es innovación nunca”. En una frase Dani tumbaba la estrategia de alguna -¿o muchas?- empresas mientras rompía una lanza a favor del diseño de servicios. “La clave de la transformación digital junto a la simplificación de procesos”. Make it simple, stupid.Ahora sí: dulces, dulcísimos, cafeína, vitamina C y nuevos contactos. Mensajes de tranquilidad, de que “todo estaba saliendo genial”, guiños cómplices, palmaditas de apoyo, suspiros liberadores de adrenalina y gestos, muchos gestos. Es increíble la capacidad de comunicación del lenguaje no verbal en los días importantes.