Claves para crear una página web profesional

Desarrollo Web y Programación
10 Abril, 2023

A día de hoy cualquier empresa, por pequeña que sea, tiene una web. Parece mentira una afirmación de este calibre si tenemos en cuenta que internet (y por supuesto no tal y como lo conocemos hoy) solo existe desde hace 40 años. Pero el tiempo pasa volando, y los avances tecnológicos han evolucionado de una manera vertiginosa que ha provocado que no solo sea necesario “estar”, sino “estar bien”.

Los usuarios no se chupan el dedo y disciernen a la perfección entre una página web estructurada, profesional y optimizada a una que se ha hecho deprisa y corriendo. Hoy en día si al entrar en una web el usuario no entiende algo, la culpa no es de su experiencia navegando, sino de la navegación del sitio web. Así que si estás pensando en abrir una página en este loco mundo de internet con sentido, coherencia y bien estructurada, este es tu post. 

Estructura de una web

Claves para crear una página web profesional

Antes de nada, una pequeña definición de estructura cuando hablamos de página web. Este concepto hace referencia al orden que se le pueden dar a los elementos de una página hasta que esta se compone. El modo en el que se presentan tanto los elementos visuales como los contenidos son esenciales para que el usuario no se pierda y complete todos los pasos que deseas que haga. En este punto, recuerda los 5 trucos clave que no debes olvidar para diseñar una página. 

Los beneficios de tener una estructura web sencilla 

y coherente son infinitos. Pero los principales son que permite una buena navegación, genera jerarquías dando su importancia a cada apartado, y hace más fácil que el usuario se ubique, generando así mayor interacción y conversiones. 

Nos encantaría darte una fórmula mágica de estructura que funcione, pero sentimos decirte que no existe. Las combinaciones son muchas y dependerá en gran medida de la naturaleza del negocio. Lo que sí podemos adelantarte es que hay tres elementos indispensables a la hora de ir estructurando una página: el encabezado, el cuerpo y el pie de página. Echemos un vistazo a cada uno de ellos.

Encabezado

El encabezado es la carta de presentación de tu web. El punto más complejo aquí es que debes intentar condensar la información principal de una manera sencilla y fresca. Suena a reto, ¿verdad? 

Entre los atributos que no pueden faltar en un encabezado está tu logo (o nombre de marca), para que el usuario pueda ubicarte y saber dónde se encuentra. Otro punto importante es el menú de opciones: ¿qué va a poder hacer tu usuario en tu página web? Puedes recurrir a un desplegable si los servicios o información que quieres aportar lo requieren, pero ten en cuenta que debe primar la simplicidad. No sobrecargues un apartado en el que tenemos un objetivo: que el usuario no se apabulle y rebote de m

anera directa fuera de tu web. 

Por último, recuerda incluir botones que lleven a la acción. De nuevo, no hay un esquema inamovible: sino que dependerá de tus necesidades. Puede ser desde un teléfono de contacto, hasta un carrito de compra, pasando por una barra de buscador o un acceso directo a un chat de ayuda.

Cuerpo

El cuerpo de una página web es donde se engloban los contenidos de la misma. Dicho mal y pronto: la verdadera “chicha” del asunto, porque es el lugar donde el usuario encontrará las respuestas a las preguntas que tenga. 

Aunque este apartado puede ser tan extenso como quieras, recuerda que una web no es un libro ni muchísimo menos. No debes saturar a tu usuario con textos eternos que no aporten valor añadido; recuerda que la tendencia de lectura cada vez va a menos. Por eso mismo, es importante que tu contenido esté perfectamente adaptado al diseño (de eso se ocupará un UX writer) y sea lo 

más sencillo y directo posible.   

Como te adelantábamos hace un momento, el cuerpo de una página web no solo se encuentra en forma de texto, sino que también entran en juego elementos de diseño que son indispensables como puede ser un banner, una herramienta de navegación, un mosaico o un vídeo embebido, entre otros. En este punto es esencial que las dos disciplinas (diseño y contenido) estén perfectamente empastadas, dando así lugar a una experiencia usuario de diez

Pie de página

El pie de página es lo último que encontrarás al hacer scroll en una web (un dato antes de seguir: es probable que también escuches que se refieren a este apartado como footer). 

En esta parte no se deben incluir datos que n

ecesitemos que nuestro usuario lea en primera instancia, pero sí es un buen lugar para incluir información que sí es imprescindible que esté, como la ley de RGPD o, lo que es lo mismo, la Ley de Protección de Datos, tus datos de contacto o un pequeño menú alternativo que lleve a información relevante, favoreciendo así el enlazado interno.

Una vez ya tienes clara la estructura de tu web y te has hecho con tu herramienta preferida para crear la página (un CMS como Wordpress, por ejemplo), es hora de ir a la parte más técnica. 

Incluye los plugins que necesites

 

Claves para crear una página web profesional

Si sabes a lo que nos referimos cuando hablamos de “plugin”, puedes saltarte este párrafo. Si no, sigue leyendo. Un plugin es un fragmento de código que se incluye en el backend de la web (que no es lo mismo que frontend) y que permite añadir funcionalidades a una página. El objetivo de añadir plugins es sencillamente facilitar y optimizar la famosa user experience (UX). 

Para poder manejar estos componentes de código, te recomendamos desde ya mismo recurrir a un profesional especializado en desarrollo web. En Góbalo tenemos una disciplina que se encarga específicamente de todo lo relativo a estas tareas. Sin embargo, nosotros consideramos que es importante que tú también sientas familiares algunos conceptos como este para que no te pierdas en ninguna fase del proceso. 

Beneficios de incluir plugins en tu web

Los beneficios de incluir plugins en un sitio web son muchos, pero resaltamos tres principalmente: 

  • Puedes añadirle funciones a tu web que no existían: desde insertar un vídeo en tu contenido, hasta cambiar el tamaño de las fuentes o incluso hacer un trackeo de datos que después pueden resultarte extremadamente valiosos para tu estrategia web. 
  • Hace más sencilla la usabilidad de la web, haciendo que la edición de la misma sea mucho más intuitiva. Un ejemplo muy claro puede ser la inserción de una imagen. Sin un plugin, es probable que tengas que acceder al back end y toquetear el código. Con la ayuda de un plugin, puedes hacer este proceso mucho más rápido y sencillo incluyendo un botón de “Insertar imagen”, por ejemplo. 
  • Aligera la web en lo que respecta a su peso. Actualmente existen otros programas externos que pueden insertarse y ayudarte en los dos pasos anteriores. Sin embargo, estos ralentizarán enormemente tu página web (porque pesan), y se penalizará de cara al SEO. Los plugins tienen un peso ligero y se insertan directamente, haciendo la navegación más eficiente. 

¿Qué tipos de plugins existen?

Los plugins, como ya sabemos, se insertan cuando se necesitan funcionalidades adicionales. Esto lo pueden hacer los creadores originales del software principal (al que también se lo conoce como host) o terceros (desarrolladores que entran a trabajar y enriquecer la web). 

Hay algunos tipos de plugins más famosos que otros, pero entre los principales están los siguientes:

  • Los plugins de navegador, que permiten abrir archivos con diferentes formatos y ayudan a gestionar las cookies. Su principal función es optimizar la web a efectos de seguridad. 
  • Los plugins de vídeo, que permiten insertar este tipo de contenidos con mayor facilidad. 
  • Los plugins de redes sociales, que facilitan la posibilidad de incluir los iconos a redes sociales haciendo así más accesible que el usuario navegue por todo lo que tenga que ver con la empresa.
  • Los plugins de sistemas de gestión de contenido, que engloban a su vez  muchísimas funcionalidades (prácticamente no tienen límites). 

¡Hasta aquí el post de hoy! Esperamos haber sido didácticos y que hayas entendido algunas implicaciones que tiene crear una web plenamente profesional y funcional. 

En Góbalo somos un equipo inconformista encargado de proyectos para clientes que necesitan una página web o quieren mejorar la existente. Así que, si tienes cualquier duda, cuenta con nosotros.

¡Aquí nos tienes!

Nos leemos en el próximo artículo.